Despedimos el año con una nueva edición de la Revista CONFEBUS, bajo el título “Perspectivas para el autobús. Horizonte 2022”, en la que la que ponemos el foco en las prioridades y perspectivas para la recuperación del sector, así como en la necesidad de más fondos y el apoyo de las administraciones para poder garantizar la movilidad. Este número también puede leerse o descargarse en la página web de la Confederación: Nº 25.
Otros de los principales temas que recogemos en este número son: la celebración de la Junta Directiva de CONFEBUS; la solicitud de una subida extraordinaria de las tarifas para paliar el elevado precio del gasóleo; el papel clave del autocar para el desarrollo y recuperación del Turismo; el acuerdo al que ha llegado CONFEBUS con Fundación Telefónica, CEOE y ASTIC para digitalizar el sector del transporte por carretera en España; la puesta en marcha del Plan de Formación CONFEBUS 2021-2022; el lanzamiento de la Estrategia de Movilidad Segura, Sostenible y Conectada 2030; un análisis de los PGE 2022 desde la óptica de la movilidad; la campaña de promoción del transporte público del Mitma “El transporte público te echa de menos”; la insuficiencia de las ayudas para renovar las flotas y provocar el cambio tecnológico; la distribución de casi 1.000 millones de euros para transformar la movilidad; la aprobación de la Ley de Tráfico, Circulación de Vehículos a Motor y Seguridad Vial; la posición del Consejo Europeo sobre la reforma de la Euroviñeta; las propuestas de CONFEBUS para los servicios digitales de movilidad multimodal; junto con diferentes noticias de interés sobre las Organizaciones de CONFEBUS, las principales novedades en las autonomías, de las empresas del sector, de la industria... y mucho más.
Editorial: El oxígeno que el sector necesita
Termina este año 2021 con una pérdida estructural difícil de cuantificar en este momento, pero todo apunta a que es probable que no seamos capaces de recuperar las cifras de 2019. Por ello, seguimos necesitando apoyo y compensaciones que nos ayuden a garantizar la prestación del servicio.
Las ayudas europeas y el apoyo del Gobierno de España son el oxígeno que asegurará la supervivencia de este sector tan gravemente afectado por la pandemia. El transporte en autobús no solo precisa del mantenimiento de los sistemas de apoyo puestos en marcha hasta ahora, si no también de un esfuerzo adicional para conseguir recuperar las cifras pre-covid.
Es necesario que el Gobierno plantee una nueva prórroga de los ERTE, así como una ampliación del periodo de carencia de los créditos ICO hasta finales de 2022. Igualmente importante es el proyecto de Ley de Movilidad Sostenible y Financiación del Transporte, en cuyo proceso de consultas CONFEBUS participó activamente con numerosas propuestas, entre las que destaca la necesidad de que esta ley contemple la financiación de todo el sistema de movilidad desde una óptica multimodal de las Obligaciones de Servicio Público, buscando la eficiencia del sistema y en línea con lo manifestado recientemente por la CNMC. Un proyecto de ley cuyo texto aún es desconocido por el sector y en el que hubiera sido deseable la participación en su elaboración.
Otra de las grandes preocupaciones del transporte en autobús es la posible introducción de la tarificación por el uso de infraestructuras, así como el posible incremento fiscal del diésel. La elevada carga fiscal que ya padece esta industria, aumentada con la aplicación de estas nuevas figuras impositivas a los operadores, desincentivaría el uso del transporte colectivo y otorgaría un tratamiento más favorable al vehículo privado, una clara contradicción con los objetivos medioambientales y de sostenibilidad de la UE y del propio ejecutivo español.
En cuanto a las ayudas europeas, es indispensable que se reestructuren los planes de ayudas para que realmente nuestro sector pueda captar los fondos y lleguen a todas las empresas, con independencia de su tamaño o actividad. CONFEBUS lamenta el modo en el que se han estructurado las ayudas de 400 millones de euros para la renovación de flotas, ya que ciertas dificultades y limitaciones van a complicar la ejecución de esos fondos.
Conviene recordar que las empresas de transporte de viajeros por carretera son esenciales, garantizan el derecho a la movilidad de millones de ciudadanos cada día y el desarrollo económico en buena parte del país, asegurando el acceso a los servicios básicos del estado del bienestar, como la sanidad, la educación o el trabajo, y contribuyen de manera decidida al desarrollo de la principal industria de nuestro país, el Turismo.
Por último, queremos agradecer la enorme labor realizada por todos los que componen este tejido empresarial, por su incansable esfuerzo y su compromiso con el servicio público de transporte, esperando que esta colaboración entre los integrantes del sector siga creciendo y nos permita continuar esta senda de recuperación.