El pasado jueves, la Federación Empresarial Balear de Transportes (FEBT) se reunió con la delegada del Gobierno de España en Baleares, Aina Calvo, para pedir el “total” apoyo de la administración central al sector del transporte balear en relación a las medidas adoptadas por el Gobierno, tanto en lo que se refiere a ayudas económicas, como en todo lo relativo a la adaptación de medidas.
Así, los temas que abordaron con la delegada estuvieron relacionados con la problemática que se está viviendo en el sector del transporte desde mediados de marzo, mostrando su preocupación ante la gravedad de la crisis.
El objetivo es garantizar a corto plazo la viabilidad de las empresas del sector, ya que consideran que son los grandes olvidados por parte de las instituciones públicas.
Entre las principales peticiones destacan la concreción de las líneas de crédito específico para dotar de liquidez a las empresas, así como el aplazamiento durante dos años de los leasings y otros sistemas financieros de los vehículos.
Otro aspecto en el que incidieron fue en que haya bonificaciones en el pago de impuestos durante todo el periodo que dure la actual crisis y que se mantengan los ERTE más allá del estado de alarma. Asimismo, han pedido más agilidad a la administración.
“Pedimos la supervivencia de las empresas y sus trabajadores, consideramos que es de sentido común lo que pedimos”, afirma el presidente de la FEBT, Rafael Roig.
Además del presidente de la FEBT, también asistieron a la reunión los presidentes de las agrupaciones federadas del transporte de mercancías, Ezequiel Horrach, y de taxis, Toni Bauzá, entre otros.
Más de 1.200 autocares están parados
El transporte turístico en las Islas Baleares tiene toda su flota de autobuses en los garajes por la falta de actividad desde el mes de marzo. Esta situación ha provocado que en estos momentos estén parados más de 1.200 autocares. La coyuntura es valorada por la FEBT como crítica, porque las previsiones para 2021 son toda una incógnita en estos momentos.