Un comité de expertos
que asesora al Primer Ministro de Francia ha emitido un documento de reflexión
sobre el futuro del transporte interurbano de larga distancia en autocar
(servicios con distancias superiores a los 100 km) en su país.
A continuación se extraen las principales conclusiones de este documento "Perspectivas de desarrollo de los autocares":
- Se prevé un importante crecimiento del número anual de viajeros (en 2016 se transportaron a 6,2 millones de viajeros) que supondría un volumen cuya cifra oscilaría entre los 15 y los 25 millones de viajeros para 2030, apuntando tres escenarios a ese horizonte que supondrían tráficos potenciales de 15, 20 o 25 millones de viajeros al año.
- Para cumplir las previsiones de demanda de viajeros de esos tres escenarios, se estima que se necesitarán entre 760 y 1.270 autocares, y entre 2.660 y 4.440 conductores, pasando a ocupar el sector de los servicios de transporte en autocar de larga distancia un número de trabajadores entre 3.100 y 5.170 personas (frente a las 2.100 que se han empleado en el primer trimestre de 2017).
- Según este documento de reflexión, el crecimiento de estos servicios supondría que la empresa pública ferroviaria SNCF podría perder hasta 8 millones de viajeros (casi el 4% del volumen de viajeros de servicios de tren de larga distancia en 2015).
- El informe también recalca que la mayor barrera que podría frenar este crecimiento la constituirían la calidad de los puntos de parada y de las estaciones de autobuses, que no se han adaptado a la rápida evolución del mercado de los servicios de transporte en autocar de larga distancia tras la liberalización en agosto de 2015 y cuya adaptación a las necesidades de los viajeros debe convertirse en una prioridad, resultando necesario que las ciudades pasen a considerarlas como un factor de atracción y que se diseñen verdaderos centros de intercambios multimodales con alto nivel de servicios.
- Como explica el documento, el mercado francés de servicios de larga distancia en autobús cuenta solamente con tres empresas operando actualmente (Ouibus cuyo 95% pertenece a la empresa pública ferroviaria SNCF, Flixbus e Isilines -marca de Eurolines para servicios interiores cuyo 100% pertenece a Transdev). Pese a que inicialmente sí lo hacían, Megabus de la británica Stagecoach y Starshipper -una red francesa de empresas locales- han dejado de operar servicios de transporte de larga distancia en autocar en el mercado francés.